29.5.22

Pierre Drieu La Rochelle


Él sólo era capaz de una acción hermosa: destruirse.
Esa destrucción sería su homenaje a la vida, el único del que sería capaz.

En Pierre Drieu La Rochelle (París, 1893-1945), la herida supura. Es el maldito entre los malditos, el atormentado, el colaboracionista, el chivo expiatorio. Dedicó toda su obra a hablar de decadencia y suicidio. Al final, consiguió ser coherente: tras la Liberación, rechazó huir, justificó su adhesión a Vichy y le ahorró balas a los gaullistas con una sobredosis de barbitúricos. Dejó libros que hoy solo se encuentran en bibliotecas y librerías de viejo; casi todo está descatalogado. Para leerle, hay que escarbar aquí y allá.

Sin embargo, leer sobre él sí es accesible. Además de en Internet, hay varias biografías publicadas. La más reciente y divulgada es la de Enrique López Viejo, Pierre Drieu La Rochelle, el aciago seductor (Ed. Melusina), muy recomendable como introducción al autor y a la época. Además, no pretende justificar retroactivamente a Drieu: lo presenta tal cual era, un dandi, fascista y misántropo que utilizaba a las mujeres para ascender socialmente; un tipo a veces delirante, frustrado y rencoroso, que toda su vida quiso morir. Imposible que nos resulte indiferente.

22.5.22

Ongs y sociedad civil

Desde los años noventa, se han venido creando miles y miles de Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) que presentan una serie de características muy definidas. Paradójicamente, dos de estas características, tal vez las más importantes, se reflejan en lo equívoco del nombre, que no podría ser más desacertado.

Así, el término "organizaciones" resulta erróneo en muchos casos. Gran parte de ellas no son organizaciones en el sentido estricto, ya que ello implicaría una coordinación compleja entre un mínimo de personas autónomas con opiniones divergentes. Pero ¡hay muchas ONGs que son unipersonales! Todos las hemos visto: en reuniones o conferencias, se presenta un fulano o fulana proclamando que él o ella es una ONG. Puede incluso que tenga donantes, tal vez algún voluntario, pero la "organización" es solo suya.

15.5.22

Así se domina el mundo

Parece claro que el coronavirus va a transformar nuestras vidas y que, cuando esto pase y salgamos de nuestros encierros, el mundo que encontraremos no será el mismo de antes. Trasladado a las humanidades, podemos decir que esta pandemia actuará como la navaja de Ockham, separando lo banal de lo importante y dejando solo lo necesario para la reconstrucción económica y social. Tardaremos mucho en volver a leer a plañideras anti-Ilustración, a disfrutar de retretes como culminaciones artísticas o a considerar buena filosofía la jerigonza posmoderna. Nos esperan problemas capitales, y los libros que leeremos ya no podrán ser pérdidas de tiempo; el panorama que se avecina es demasiado poco halagüeño.

8.5.22

Leer a Escohotado en tiempos de crisis

Antonio Escohotado cae bien porque su indiferencia hacia el canon progre es notoria. En sus libros, entrevistas y conferencias, defiende lo que cree que es la verdad sin importarle ser excluido de esa moralidad izquierdista que lo acapara todo, lo juzga todo y, finalmente, lo constriñe todo. A lo largo de su extensa vida ha estudiado y escrito sobre diversos ámbitos, como las drogas, la física y la economía, siempre desde una perspectiva más o menos libertaria. Es uno de los pocos intelectuales españoles inconfundibles: nadie dice lo mismo que él ni de la misma manera. Cualquier página suya es reconocible por su estilo y temática.

Todavía no existe un manual introductorio a su pensamiento, ni —que se sepa— una tesis doctoral de libre acceso en internet. Una pena. Si bien su obra es accesible para el lector medio, siempre es útil contar con la orientación de alguien docto que haya navegado más hondo en su pensamiento.

1.5.22

Los enemigos del comercio

Antonio Escohotado (Madrid, 1941) es uno de los intelectuales más completos que tenemos en España en la actualidad. Ajeno a las banderías políticas, buen escritor y divulgador, parece haberlo leído todo y saber de todo bastante. Además, es uno de los pocos pensadores españoles con repercusión internacional. Su Historia general de las drogas fue una obra pionera en su momento, ya que el estudio serio de las sustancias ilegalizadas era prácticamente inexistente hasta entonces. El libro fue traducido con éxito a varios idiomas.

Formado en derecho, sociología y filosofía, en los últimos años ha centrado su trabajo en cuestiones económicas. Su monumental trilogía Los enemigos del comercio es prueba de ello. El primer volumen, publicado en 2008, prometía ser el prefacio de una obra definitiva en la crítica del intervencionismo estatal y la defensa de la libre iniciativa. En él, Escohotado analizaba la caída del Imperio Romano como consecuencia de su transformación en una economía basada en el saqueo y la esclavitud, para luego ser sucedido por un cristianismo pobrista y mezquino en la Edad Media, igualmente hostil al comercio.